CIENTO TRES SUEÑOS
Llevaba ciento tres años sentada
cuando fueron a acostarla.
Entre cuatro personas la sujetaron,
apenas si podían con ella.
Consiguieron levantarla del asiento
pero se desplomó
de nuevo sobre la silla.
¿Qué ha pasado? –le preguntaron.
Me ha vencido el sueño –contestó.Imaginen el sueño de alguien
que ha pasado sentado
ciento tres años.
EL NUEVO ALCALDE
Hoy está nublado:
es necesario que el alcalde
se explique al respecto.El alcalde puede ser cualquiera.
Cada mes alguien asume el cargo
y, si sobrevive,
al mes siguiente se afeita la cabeza.Pero hoy, que está nublado,
le corresponde ser alcalde
al que se golpea el corazón.
Y con eso, las orquídeas,
se sienten satisfechas.
LA CONFIANZA
Cruzan la misma pierna
y, mirando al frente,
se sujetan la barbilla
a la vez.Tuercen la boca simultáneamente
hacia un lado,
hacia el otro.Él está inmerso en sí mientras
ella también está inmersa en sí
porque están pensando en sus cosas
y ya se sabe
que en cuanto aparecen las cosas
se acaba el poema.
Entonces... ¿qué te pareció?
Comenta, sugiere, disiente... nos gustará mucho escuchar tu opinión.
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